Blogia
BEISBOL 007

Los Piratas parecen estar encaminados a cosas buenas‏

Los Piratas llevan un tiempo con un plan inteligente y sensato. Es un modelo que vieron en los Rays, Rangers Reales y otros equipos que han construido sus franquicias con una base en su sistema de liga menor.

No sólo es la manera correcta de hacer las cosas, sino que es la única forma para un club que no puede darse el lujo de construir a base de la agencia libre. Esta filosofía sí tiene un lado negativo: no maravilla la atención a los fanáticos, al menos en un principio.

No es lo más llamativo invertir los recursos de una franquicia en muchachos de 18 años a los que les faltan unos cinco años para llegar a Grandes Ligas. Los fanáticos de los Piratas han escuchado lo mismo durante mucho tiempo, así que cuando su club llegó a 19 temporadas seguidas con récord perdedor, no tenían idea si las cosas cambiaban o no.

Bueno, un mensaje a la fanaticada bucanera: las cosas están mejorando de verdad-y rápido. Los Piratas no están de regreso del todo, pero están más cerca. Están coleccionado brazos de calidad y peloteros con velocidad, y por ahí viene la recompensa.

El acuerdo de seis años y US$51.5 millones de Pittsburgh con su joven jardinero Andrew McCutchen es un indicio de que la reconstrucción del equipo está entrando a otra fase. Empezó el año pasado con la firma del jardinero venezolano José Tábata, quien estaría bajo control contractual de los Piratas hasta el 2019.

"Hemos dicho desde el principio que tenemos un plan para construir talento y luego retenerlo", le dijo el máximo ejecutivo del club, Bob Nutting, recientemente a MLB.com.

Durante unos meses en el verano del 2011, parecía que los Piratas habían vuelto a ser un equipo competitivo. Con Clint Hurdle como manager, en Pittsburgh mandaba alguien que exigía que las cosas se hicieran de una manera específica.

Debido a la confianza de Hurdle, por su forma de lidiar con la gente y su manera de hacerle creer a todo pelotero que es capaz de hacer más de lo que cree, todo se sintió diferente en Pittsburgh la temporada pasada.

A partir del 25 de julio, los Piratas tenían marca de 53-47 y estaban en la cima de la División Central de la Liga Nacional. Pero de allí hasta el final de la campaña tuvieron apenas 19-43, debido mayormente a varias lesiones y baches ofensivos de varios jugadores. Al final Pittsburgh utilizó un total de 52 peloteros en el 2011, 10 de ellos debutantes en Grandes Ligas.

Sin embargo, la efectividad colectiva del equipo (4.04) mejoró en casa una carrera entera en comparación con el año anterior. Pittsburgh contó con tres jugadores en el Juego de Estrellas-McCutchen, el cerrador Joel Hanrahan y el derecho Kevin Correia-por primera vez desde 1990.

Los fanáticos también empezaron a creer en este equipo. Los Piratas tuvieron una asistencia de 1.9 millones en el 2011, la mayor desde que se inauguró el PNC Park en el 2001 y la cuarta mayor en la historia de la franquicia.

El gerente general Neal Huntington ha continuado firmando a los agentes libres menos caros, encontrando veteranos que caben en su modelo y su alcance económico. Correia ganó 12 juegos y lanzó 154 entradas el año pasado, luego de que Huntington lo firmara por US$4 millones.

Para esta temporada, Clint Barmes se encargará del campo corto, luego de batear .244 por los Astros en el 2011. Han sido dos años duros para Barmes, con un difícil embarazo de su esposa y la muerte de su padre por cáncer.

Ahora bien, Hurdle conoce a Barmes muy bien, de sus siete años juntos en Colorado. El manager de Pittsburgh sabe que Barmes está por encima del promedio a la defensa, que es todo un profesional y que sí es capaz de aportar algo con el bate.

Los Piratas necesitan que el tercera base dominicano Pedro Alvarez sea el jugador que una vez estuvo proyectado a ser. También necesitan que A.J. Burnett sane y que regrese al montículo. Necesitan que Correia, James McDonald, Jeff Karstens y el resto de la rotación abridora sean productivos.

En otras palabras, Pittsburgh tendrá la oportunidad de competir en una división sin un claro favorito. Son pocos los que lo señalará como el favorito pero, diferente a años anteriores, el equipo no va a pasar totalmente desapercibido.

Con todo y eso, el 2012 representa sólo un paso más en el camino. Hace apenas dos años, Huntington estaba siendo fuertemente criticado por seguir cambiando a jugadores de Grandes Ligas por talento de liga menor.

El ejecutivo heredó un desastre cuando tomó las riendas de los Piratas luego de la temporada del 2007. Sabía que a nivel del equipo grande, ningún ajuste sería suficiente para que los Piratas compitieran, sobre todo con una finca tan débil.

Los canjes realizados por Huntington en aquellos tiempos no significaban que los Bucaneros fueran tacaños ni que el club fuera horrible para siempre. De hecho, los Piratas sí han gastado bastante dinero desde que Nutting se convirtió en máximo ejecutivo antes de la campaña del 2007.

Huntington había estado con los Indios y los Expos cuando ambas franquicias se operaban con inteligencia.

En cuatro drafts, Huntington ha pagado US$47.6 millones en bonificaciones, incluyendo US$17 millones en el 2011. Ha invertido en el mercado internacional, fichando al mexicano Luis Heredia-prospecto número 6 del equipo ahora mismo según MLB.com. En Gerrit Cole y Jameson Taillon, Pittsburgh cuenta con dos de los mejores brazos en todo el béisbol.

Los Piratas tienen un plan diseñado para devolver al equipo a la respetabilidad paso por paso. Y lo mejor es que, una vez estén de regreso, tienen la oportunidad de estar ahí por mucho tiempo.

A esta altura los Bucaneros no están simple y llanamente coleccionando talento joven. Ya tienen suficientes jugadores como para ver cómo están cambiando las cosas en liga menor, donde tres de sus sucursales fueron a postemporada en el 2011. En general su sistema tuvo porcentaje de ganados y perdidos de .512 el año pasado.

Se aproxima un nuevo día para los Piratas, y no está lejos. En algún momento McCuthen tuvo que haberle preguntado si las cosas cambiarían en Pittsbrugh. Ahora puede creer que podría ser parte de algo especial.

Richard Justice / MLB.com

 

 

 

0 comentarios