Maglio Ordoñez se siente bien en los entrenamientos

LAKELAND, Florida -- Una primera mitad de campaña floja con los Tigres de Detroit en 2009 obligó al veterano Magglio Ordóñez a fortalecerse más en el receso invernal.

El toletero venezolano decidió tras la campaña realizar por primera vez un tipo de entrenamiento especial, en el que también participó su compañero y compatriota Miguel Cabrera.

Ordóñez, de 36 años, se entrenó en una instalación en Florida donde practican los jugadores de fútbol americano y lo hizo durante noviembre, diciembre y enero.

"No es que voy a jugar fútbol americano", afirma con una sonrisa el guardabosque, que dejó atrás los tiempos de su larga melena. "Me siento más rápido, con más fuerza".

Ordóñez reconoce que a su edad requiere trabajar más en su acondicionamiento físico.

El año pasado jugó sin problemas de lesiones pero tuvo una primera mitad aletargada con el bate que al final se notó en sus estadísticas. El venezolano calentó motores en la segunda parte y los Tigres pelearon hasta el final de la campaña por el pase a los playoffs.

Ordóñez finalizó con promedio de .310 en 465 turnos al bate, con nueve jonrones y 50 impulsadas, cifras que están muy lejos para un bateador de calibre acostumbrado a disparar más de 20 cuadrangulares y empujar más de 100 carreras.

"Son cosas que se le van a uno de las manos", expresó Ordóñez a la AP después de un partido de pretemporada frente a los Azulejos de Toronto.

El coach Rafael Belliard dijo que Ordóñez tuvo problemas al comienzo pero que luego se aplomó. "Eso era lo que esperábamos que se calentara. Ojalá este año tenga un inicio como terminó en el 2009".

"Este es el entrenamiento primaveral en que mejor lo he visto", agregó.

El venezolano espera que su entrenamiento en el receso rinda frutos desde el arranque. También cree que podría beneficiarse con el ingreso a la alineación del jardinero Johnny Damon, quien arribó desde los Yanquis de Nueva York.

Damon, quien ganó la Serie Mundial con los Medias Rojas de Boston y los Yanquis, antecederá a Ordóñez como segundo bate en la alineación.

"Esa adquisición es positiva", manifestó Ordóñez. "El a cada rato está en base y es un corredor rápido. Los pitchers van a estar pendiente de él y cualquier descuido o error que comentan conmigo voy a tratar de aprovecharlo".

Ordóñez, Cabrera y el también venezolano Carlos Guillén son la columna vertebral de la ofensiva de los Tigres.