Dominicano Jose Reyes de emergencia
Juan Vené en la Pelota
La TV, los números y las Grandes Ligas
Mérida, Yucatán (VIP-WIRE).-
La televisión ha sido un tremendo vehículo para difundir las Grandes Ligas. Hasta hace unos 20 años, se transmitía un juego a la semana para América Latina, muchas veces grabado, diferido. Ahora tres o más cada día y en vivo.
Una bendición para los fanáticos, quienes ya no tienen que viajar a las Mayores. Todos los días tienen el espectáculo en casa.
Pero esa maravilla es todo lo contrario, una inmensa calamidad, para quienes pretenden ser analistas, fuentes de opinión, periodistas en fin, por televisión. Un estudio universitario estableció hace tres años, que el televidente ve sólo el 40% del juego de pelota. Y eso es fácil de comprobar.
E igual ocurre con la numerología. Las estadísticas son vitales, muy importantes en nuestro amado deporte. Pero no lo son todo. Calificar a un bigleaguer sólo por sus números es criminal, una equivocación.
Utilizar nada más la televisión y las estadísticas para establecer una opinión, es como utilizar sólo los cinco Continentes para analizar al mundo. Los océanos, desde luego, son mayores y más importantes.
Eso explica por qué las reglamentaciones del Hall de la Fama de Cooperstown, exigen haber cubierto personalmente como periodista, un mínimum de mil juegos de Grandes Ligas en 10 temporadas consecutivas, para poder ser elector. Generalmente en 10 años uno trabaja en más de mil juegos, porque son 162 por temporada.
El beisbol es una especie de ballet. El ritmo y el acoplamiento del conjunto es necesario para el éxito. En ningún otro deporte se necesitan cinco, seis y hasta siete semanas de entrenamientos, ningún otro deporte es de actividad diaria, en ningún otro deporte se anota todo cuanto hacen los protagonistas, en ningún otro deporte un jugador puede ser más o menos valioso de lo que dicen sus números.
Pero también es el beisbol el deporte con más falsos expertos, muchos de los cuales califican de muy eficiente a un bateador de 300 sobre otro de 270, sin averiguar (sin saber) más nada.
Es que en buen periodismo, el reportero debe estar donde ocurre lo que reseña. Y más si se trata del beisbol, un juego tan profundo en todo sentido, y por eso tan exigente.
RETAZOS.- ** De urgencia llegó ayer a Nueva York el shortstop dominicano de los Mets, José Reyes. Y hoy lunes será internado en el Hospital For Special Surgery, en Manhattan, a fin de ser examinado y tratarlo de la tiroides. Hablan de falta de balance y de hiperactividad. El gerente general, Omar Minaya, está muy optimista, porque me dijo desde Port St. Lucie...: Es un procedimiento de precaución y nada más. José estará de vuelta muy pronto... ** SE SUPO en este pueblecito que llaman Nueva York, del enojo de varios ejecutivos de los Yankees con Alex Rodríguez. Se quejan porque el slugger no les informó que el FBI lo interroga acerca de las actividades del médico canadiense Anthony Galea, acusado de suministrarles hormonas de crecimiento humano a los atletas profesionales... ** ENTRE los jóvenes lanzadores a quienes vale la pena observar de cerca este año, figura Stephen Strasburg, de 21 años. Los Nationals quieren que comience la temporada en triple A para que madure lo suficiente. Pero él está en Viera, Florida, empeñado en ganarse un puesto en la rotación...
Gracias a la vida que me ha dado tanto.
jbeisbol5@aol.com
La TV, los números y las Grandes Ligas
Mérida, Yucatán (VIP-WIRE).-
La televisión ha sido un tremendo vehículo para difundir las Grandes Ligas. Hasta hace unos 20 años, se transmitía un juego a la semana para América Latina, muchas veces grabado, diferido. Ahora tres o más cada día y en vivo.
Una bendición para los fanáticos, quienes ya no tienen que viajar a las Mayores. Todos los días tienen el espectáculo en casa.
Pero esa maravilla es todo lo contrario, una inmensa calamidad, para quienes pretenden ser analistas, fuentes de opinión, periodistas en fin, por televisión. Un estudio universitario estableció hace tres años, que el televidente ve sólo el 40% del juego de pelota. Y eso es fácil de comprobar.
E igual ocurre con la numerología. Las estadísticas son vitales, muy importantes en nuestro amado deporte. Pero no lo son todo. Calificar a un bigleaguer sólo por sus números es criminal, una equivocación.
Utilizar nada más la televisión y las estadísticas para establecer una opinión, es como utilizar sólo los cinco Continentes para analizar al mundo. Los océanos, desde luego, son mayores y más importantes.
Eso explica por qué las reglamentaciones del Hall de la Fama de Cooperstown, exigen haber cubierto personalmente como periodista, un mínimum de mil juegos de Grandes Ligas en 10 temporadas consecutivas, para poder ser elector. Generalmente en 10 años uno trabaja en más de mil juegos, porque son 162 por temporada.
El beisbol es una especie de ballet. El ritmo y el acoplamiento del conjunto es necesario para el éxito. En ningún otro deporte se necesitan cinco, seis y hasta siete semanas de entrenamientos, ningún otro deporte es de actividad diaria, en ningún otro deporte se anota todo cuanto hacen los protagonistas, en ningún otro deporte un jugador puede ser más o menos valioso de lo que dicen sus números.
Pero también es el beisbol el deporte con más falsos expertos, muchos de los cuales califican de muy eficiente a un bateador de 300 sobre otro de 270, sin averiguar (sin saber) más nada.
Es que en buen periodismo, el reportero debe estar donde ocurre lo que reseña. Y más si se trata del beisbol, un juego tan profundo en todo sentido, y por eso tan exigente.
RETAZOS.- ** De urgencia llegó ayer a Nueva York el shortstop dominicano de los Mets, José Reyes. Y hoy lunes será internado en el Hospital For Special Surgery, en Manhattan, a fin de ser examinado y tratarlo de la tiroides. Hablan de falta de balance y de hiperactividad. El gerente general, Omar Minaya, está muy optimista, porque me dijo desde Port St. Lucie...: Es un procedimiento de precaución y nada más. José estará de vuelta muy pronto... ** SE SUPO en este pueblecito que llaman Nueva York, del enojo de varios ejecutivos de los Yankees con Alex Rodríguez. Se quejan porque el slugger no les informó que el FBI lo interroga acerca de las actividades del médico canadiense Anthony Galea, acusado de suministrarles hormonas de crecimiento humano a los atletas profesionales... ** ENTRE los jóvenes lanzadores a quienes vale la pena observar de cerca este año, figura Stephen Strasburg, de 21 años. Los Nationals quieren que comience la temporada en triple A para que madure lo suficiente. Pero él está en Viera, Florida, empeñado en ganarse un puesto en la rotación...
Gracias a la vida que me ha dado tanto.
jbeisbol5@aol.com
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