Twitter, un arma de doble filo

En el beisbol, en el deporte, el Twitter pudiera ser comparado con una tarjeta de crédito: si lo sabes usar le sacarás un provecho incalculable, pero de lo contrario pudiera causarte problemas, como por ejemplo quedarte sin trabajo.

Ahí está el reciente ejemplo de Oney Guillén, hijo de Ozzie, quien tuvo que salir de los Medias Blancas de Chicago, a raíz de varios comentarios en su cuenta personal del Twitter, @oneyroberto.

Oney, quien se empleaba en el departamento de cazatalentos del club, publicó en su cuenta: "Me encanta como la gente monitorea mis tweets como si yo fuera alguien importante. Todo el mundo tiene derecho a dar su opinión".

Según rumores, el gerente general del club, Ken Williams, le pidió a Oney que bajara el tono de sus tweets, y aquello terminó de causar la renuncia del hijo del manager. "Si no les gustó algo, me lo hubieran dicho en mi cara, no a mi papá", declaró Oney tras su salida.

¿Lo de Oney Guillén será un caso aislado? Todo indica que no. Cuando su padre Ozzie abrió su cuenta en Twitter, tampoco le gustó mucho a la gerencia de los patiblancos.

"Sin comentarios", declaró Williams cuando se le preguntó por la cuenta de su manager en Twitter. "Asegúrense de publicar la frase ’sin comentarios’ agregándole un rotundo ’no’ con mi cabeza".

A Guillén no le gustó para nada la reacción de su jefe. "No soy estúpido. No voy a publicar allí, ’ey, voy a hacer este movimiento hoy’ ni nada de esas cosas. Soy un adulto".

La situación no se enfoca sólo en la familia Guillén. Ha habido problemas de otra índole como el de Tony LaRussa.

Alguien creó una cuenta falsa del manager de los Cardenales de San Luis y comenzó a realizar comentarios ofensivos o comprometedores relacionados con los jugadores. "Perdimos dos de tres juegos en Chicago, pero salimos de aquí sin un incidente con alcoholismo o un pitcher muerto", fue uno de los "tweets" de aquella cuenta falsa.

Aquello enfureció a LaRussa, quien de hecho presentó una demanda contra la red social. Pero aún en Grandes Ligas no ha habido casos tan complejos como en otras disciplinas, pero bien pudieran tomar previsiones ante lo que ha ocurrido en otras latitudes.

El año pasado en la NBA, el alero de los Bucks de Milwaukee, Charlie Villanueva, tuvo la osadía de "tuitear" en el medio tiempo de un encuentro, lo cual causó conmoción en la mejor liga del orbe.

"En el vestuario, a escondidas para escribir en el Twitter", fue uno de los comentarios publicados por Villanueva. "Estamos jugando contra los Celtics y el partido está empatado al descanso. El entrenador quiere más intensidad y tengo que espabilar", agregó.

Como la espuma

Cada día más jugadores se unen al Twitter. De hecho, hay un usuario, @mlbplayers, que señala cuáles son las cuentas de los peloteros que se van sumando a esta red social.

La propagación abarca todo, inclusive a ex jugadores como José Canseco, quien a través de su cuenta, comentó la semana pasada que fue citado para hablar en el caso de los esteroides y Roger Clemens. Por cierto que Canseco ya va por más de 330 mil seguidores en esta red social.

Es que eso de expandir información, noticias, datos, resultados o comentarios vía Twitter es toda una fortaleza para el beisbol, pero como todo en la vida, el respeto y el orden al equipo y la institución son vitales. De lo contrario se abrirían las puertas a las fricciones.

José Manuel Fernández

NOTA:   La cuenta de Twitter del blog beisbol007 es   http://twitter.com/beisbol007