Bye, bye, Boston‏

Ahora que caigan los Yankees

He visto algo increíble. He visto cómo los Medias Rojas de Boston, equipo al que los conocedores visualizaban en la Serie Mundial al empezar la temporada de las Grandes Ligas, caía eliminado luego de una debacle casi histórica en el último mes de temporada. 

Boston cayó y los Tampa Bay Rays se alzaron. Los de la Florida impulsados por su jugador franquicia, Evan Longoria, se quedaron con el puesto de comodín de la Liga Americana, y sacaron a Boston de la fiesta de octubre. Tampa vivió un regreso milagroso, pues iba perdiendo 7 a 0 contra los Yankees, pero como dijo el gran Yogi Berra: "El juego no se acaba hasta que se acaba". Terminaron ganándole al todopoderoso conjunto de la Gran Manzana 8 a 7 para clasificar a la siguiente ronda. 

Boston desaprovechó las oportunidades, llegó con ventaja al noveno episodio, pero su cerrador estrella se puso nervioso y unos aguerridos Orioles de Baltimore le cambiaron el guión a la película. Uno de los villanos fue Marcos Scutaro, el jugador de los gloriosos Leones del Caracas fue reventado en el home, y lo que pudo haber sido un 4 a 2 a favor de Boston, no lo fue y lo terminaron pagando caro. 

Los Bravos de Atlanta también sucumbieron, se quedaron por fuera cuando todo el mundo los veía dentro; pero así es la vida, así es el beisbol y todavía existe gente a quien no le gusta este deporte y que no lo entiende. 

Quien dijo que en el beisbol no hay emoción es porque nunca ha visto un Caracas-Magallanes, o un Yankees-Boston. Esos son clásicos como ver un Argentina-Brasil en fútbol, o un Federer - Nadal en tenis. El beisbol es el beisbol y nunca deja mal a sus fanáticos de corazón. Adiós, Boston, y será hasta el año que viene. Ahora que caigan los Yankees.  

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@andy_schmucke