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BEISBOL 007

Endy Chávez contento llegar por fin a una Serie Mundial‏

SAN LUIS -- Hace cinco años, a Endy Chávez se le fue de las manos la oportunidad de participar en la Serie Mundial. Hace dos años, no sabía si volvería a jugar en Grandes Ligas.

En el 2011, al venezolano se le han dado ambas cosas, de una manera que jamás pudo haberse imaginado.

"Me siento bendecido", le dijo Chávez a LasMayores.com, "dándole gracias a Dios por esta oportunidad después del mal rato que pasé en mi carrera."

Fue más que un "mal rato". Chávez se refiere a una horrenda lesión que sufrió el 19 de junio del 2009 cuando jugaba en los jardines de los Marineros. En esa oportunidad chocó fuertemente con el torpedero cubano de Seattle, Yuniesky Betancourt, al buscar un elevado y sufrió una rotura de ligamento en la rodilla derecha.

Chávez se perdió el resto del 2009 y la gran mayoría del 2010, aun después de que los Rangers le dieran un contrato de liga menor.

"Tenía dudas sobre mi carrera", dijo Chávez, quien lleva promedio de por vida de .274 en 10 campañas de Grandes Ligas.

EL REGRESO A LA GRAN CARPA 
Esta temporada ha sido una especie de renacimiento para el jardinero de 33 años. En 83 partidos con el equipo grande de Texas, bateó .301 en 274 turnos, con 11 dobles, tres triples, cinco jonrones, 27 empujadas y 10 bases robadas, ocupando la titularidad del jardín central en algunos momentos del 2011.

A LOS CINCO AÑOS DE "LA ATRAPADA" 
En el 2006 Chávez fue parte íntegra de los jardines en los Mets de Nueva York, que llegaron al Juego 7 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, justamente contra los Cardenales-los oponentes de los Rangers en este Clásico de Otoño. En aquel decisivo séptimo choque en el ya desaparecido Shea Stadium de Queens, Chávez hizo una atrapada espectacular para robarle jonrón a Scott Rolen y preservar un empate 1-1 en el sexto episodio.

Pero por más famosa que haya sido la jugada de Chávez, los Mets quedaron cortos ante San Luis ese año, cuando los Cardenales se coronaron campeones al eliminar a Nueva York y luego despachar a los Tigres de Detroit en cinco juegos en la Serie Mundial.

Ahora, por fin, el oriundo de Valencia tiene la oportunidad de participar en un Clásico de Otoño y está contentísimo, aun cuando es más discreto su rol en el equipo de Texas en este momento.

"Estoy emocionado de formar parte de esta familia", dijo Chávez, quien agotó cuatro turnos en blanco en las primeras dos rondas de los playoffs por los Rangers. "Pero sabía que estaba en un buen equipo. Tuve esta segunda oportunidad y gracias a Dios esta vez lo logramos."

 

 

 

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