Guillén es un mánager grandioso
Frank Thomas, ícono de los Medias Blancas de Chicago, alabó a su ex compañero y expiloto. “Lo conocí muy bien durante toda mi carrera”, dijo. “Estuve 14 años con Ozzie”.
Si hay alguien que vivió de cerca la transición de Oswaldo Guillén de jugador a mánager y que lo conoce en ambas facetas dentro de un terreno de juego es su excompañero y exdirigido Fran Thomas.
“El Gran Dolor”, dos veces Jugador Más Valioso de la Liga Americana, actuó con el mirandino en los Medias Blancas de Chicago desde su debut, en 1990, hasta 1997, cuando el campocorto salió del club. Después estuvo bajo su mando en 2004 y 2005, año del título patiblanco y el último del ex slugger en la organización, luego de ver disminuir su tiempo de juego por decisión del criollo.
Atrás quedaron esas diferencias entre Guillén y Thomas, quienes se saludaron efusivamente durante un breve reencuentro que vivieron en Miami, durante el inicio de la campaña de las mayores.
“Lo conocí muy bien durante toda mi carrera. Estuve 14 años con Ozzie Guillén, así que sé muy bien cómo fue como jugador y cómo es como mánager”, dijo de entrada Thomas, quien ahora labora como analista de las mayores en la televisión norteamericana.
“Creo que este es un buen ambiente para él”, acotó el cuatro veces ganador del Bate de Plata sobre la mudanza de Guillén a Miami. “Creo que va a traer mucho interés para la comunidad latina y es una oportunidad especial para él, así que estoy muy contento por él”.
Thomas, uno de los bateadores más prolíficos de la década de los años 90, asegura que Guillén sigue siendo prácticamente el mismo desde sus tiempos de jugador.
“No cambia mucho. Su personalidad es su personalidad, y no va a cambiar”, advirtió el nativo de Georgia. “Él siempre ha sido así durante toda su carrera, como jugador y como mánager, y para mí es algo común, porque lo vi actuar de la misma forma como jugador y como mánager, con la misma pasión por el juego”.
La forma de ser del nativo de Ocumare del Tuy es un extra para la franquicia que ahora es conocida como Marlins de Miami. Además, Thomas afirma que su inteligencia a la hora de dirigir puede llevar al club a vivir el mismo éxito que tuvo Guillén en Chicago durante 2005.
“Conoce el béisbol muy bien, es un gran mánager y eso es lo que va a traer aquí a Miami”, destacó el cinco veces participante del Juego de Estrellas, quien afirmó que lo mejor que brinda Guillén a sus jugadores es la motivación.
“Él sabe cómo motivarlos y dirigir su juego”, expresó. “Él tiene el pitcheo, ahora puede usar más el bateo y corrido, y simplemente sacar provecho de los fundamentos de juego”.
“Eso (basar su juego en los fundamentos) es algo que muchos mánagers no hacen todo el tiempo, como él sí lo hace”, agregó. “Eso le dará mayor oportunidad de ganar”.
Thomas recuerda cómo ese conocimiento los llevó a ganar la Serie Mundial en Chicago, luego de 88 años de sequía.
“Fue increíble. Él había llegado apenas dos años antes de eso y lo que hizo en ese equipo fue grandioso”, destacó. “Todos los días revisaba con quién se iba a jugar, cuál iba a ser el enfrentamiento entre pitchers y bateadores... Era muy bueno su conocimiento del juego por haberlo jugado durante tantos años”.
“Él conoce muy bien el calendario de 162 partidos y sabe que los peloteros necesitan un día libre de vez en cuando”, agregó. “Él fue grandioso en estudiar todos esos detalles”.
AUTOR : Augusto Càrdenas /
Si hay alguien que vivió de cerca la transición de Oswaldo Guillén de jugador a mánager y que lo conoce en ambas facetas dentro de un terreno de juego es su excompañero y exdirigido Fran Thomas.
“El Gran Dolor”, dos veces Jugador Más Valioso de la Liga Americana, actuó con el mirandino en los Medias Blancas de Chicago desde su debut, en 1990, hasta 1997, cuando el campocorto salió del club. Después estuvo bajo su mando en 2004 y 2005, año del título patiblanco y el último del ex slugger en la organización, luego de ver disminuir su tiempo de juego por decisión del criollo.
Atrás quedaron esas diferencias entre Guillén y Thomas, quienes se saludaron efusivamente durante un breve reencuentro que vivieron en Miami, durante el inicio de la campaña de las mayores.
“Lo conocí muy bien durante toda mi carrera. Estuve 14 años con Ozzie Guillén, así que sé muy bien cómo fue como jugador y cómo es como mánager”, dijo de entrada Thomas, quien ahora labora como analista de las mayores en la televisión norteamericana.
“Creo que este es un buen ambiente para él”, acotó el cuatro veces ganador del Bate de Plata sobre la mudanza de Guillén a Miami. “Creo que va a traer mucho interés para la comunidad latina y es una oportunidad especial para él, así que estoy muy contento por él”.
Thomas, uno de los bateadores más prolíficos de la década de los años 90, asegura que Guillén sigue siendo prácticamente el mismo desde sus tiempos de jugador.
“No cambia mucho. Su personalidad es su personalidad, y no va a cambiar”, advirtió el nativo de Georgia. “Él siempre ha sido así durante toda su carrera, como jugador y como mánager, y para mí es algo común, porque lo vi actuar de la misma forma como jugador y como mánager, con la misma pasión por el juego”.
La forma de ser del nativo de Ocumare del Tuy es un extra para la franquicia que ahora es conocida como Marlins de Miami. Además, Thomas afirma que su inteligencia a la hora de dirigir puede llevar al club a vivir el mismo éxito que tuvo Guillén en Chicago durante 2005.
“Conoce el béisbol muy bien, es un gran mánager y eso es lo que va a traer aquí a Miami”, destacó el cinco veces participante del Juego de Estrellas, quien afirmó que lo mejor que brinda Guillén a sus jugadores es la motivación.
“Él sabe cómo motivarlos y dirigir su juego”, expresó. “Él tiene el pitcheo, ahora puede usar más el bateo y corrido, y simplemente sacar provecho de los fundamentos de juego”.
“Eso (basar su juego en los fundamentos) es algo que muchos mánagers no hacen todo el tiempo, como él sí lo hace”, agregó. “Eso le dará mayor oportunidad de ganar”.
Thomas recuerda cómo ese conocimiento los llevó a ganar la Serie Mundial en Chicago, luego de 88 años de sequía.
“Fue increíble. Él había llegado apenas dos años antes de eso y lo que hizo en ese equipo fue grandioso”, destacó. “Todos los días revisaba con quién se iba a jugar, cuál iba a ser el enfrentamiento entre pitchers y bateadores... Era muy bueno su conocimiento del juego por haberlo jugado durante tantos años”.
“Él conoce muy bien el calendario de 162 partidos y sabe que los peloteros necesitan un día libre de vez en cuando”, agregó. “Él fue grandioso en estudiar todos esos detalles”.
AUTOR : Augusto Càrdenas /
--
0 comentarios