Gerardo Parra, una figura muy querida en Arizona
PHOENIX — Aunque no aparezca como titular de los jardines en el gráfico de posiciones de los Diamonbacks, de ninguna manera se le considera a Gerardo Parra como un”cuarto jardinero”.
Al contrario, ante la difícil situación de cuatro guardabosques para tres puestos, Parra se ha mantenido como una figura tan relevante como siempre en Arizona no sólo dentro del terreno, sino también entre la afición del desierto. Su popularidad se notó más que nunca este año en la página de Facebook del equipo entre febrero y abril, cuando el zuliano fue el más votado en unas elecciones de los fanáticos para decidir cuál jugador de los Diamondbacks sería el enfoque de una promoción de obsequios de muñecas “cabeza loca” (Bobbleheads) que se realizó el sábado en el Chase Field.
“Estoy contento”, dijo Parra al hablar sobre el particular. “Le doy gracias a los fanáticos que tuvieron la dedicación y la pasión de votar. Creo que los fanáticos te están considerando tu trabajo. Así como ellos están orgullosos de lo que hace uno, yo también estoy contento de tenerlos.”
Por supuesto, el principio del año 2012 no fue lo soñado para Parra. Viniendo de la mejor temporada de su joven carrera, en la que ganó un Guante de Oro como jardinero izquierdo y ayudó a los Diamondbacks a alcanzar los playoffs, el pelotero de 25 años se topó con la noticia de que el gerente general Kevin Towers había firmado al guardabosque Jason Kubel.
En vez de quejarse o mostrarse molesto-como sería de esperarse y con algo de justificación-Parra aceptó la nueva realidad y el reto de seguir de alguna forma como una figura importante en Arizona, tal como se lo habían expresadoTowers y el manager Kirk Gibson.
“Como siempre he dicho, Dios sabe por qué hace las cosas”, manifestó Parra al respecto. “Dios siempre va a tener un propósito para uno. Llegué fuerte y mentalizado. Siempre he pensado cuando estoy en el lineup dar el mil por ciento y que sea lo que Dios quiere al final de los juegos.
“Es importante si no estás en el lineup no decir, ‘ah’, sino dar lo mejor de ti desde la banca y cuando te toque un turno importante, dar lo mejor. Mientras el equipo gane todos estamos gozando.”
Los resultados individuales de Parra hasta ahora se parecen mucho a lo que hizo en el 2011, tomando en cuenta la cantidad de turnos y las oportunidades que ha recibido. En un total de 95 juegos y 282 turnos al bate, lleva promedio de .277, porcentaje de embasarse de .345 y slugging de .404. Además, ha conectado 14 dobles y seis jonrones, con 47 anotadas, 30 empujadas y 12 bases robadas.
A la defensa ha seguido como un sólido guardabosque, cubriendo mucho terreno en cada uno de los tres jardines y registrando siete asistencias con su cañón de brazo.
Pero cuando se habla de Gerardo Parra, los números no cuentan toda la historia. La forma y la personalidad que exhibe son muy importantes en lo que aporta al equipo del desierto.
“Es una persona que trae mucha energía al estadio”, dijo el compañero, compatriota y amigo de Parra, Miguel Montero, receptor de los Diamondbacks. “Es de esos peloteros que le dicen exciting players, porque es un pelotero que juega el béisbol con mucho entusiasmo, mucha emoción.”
A Parra se le ve “en acción” casi todo el tiempo, conversando e interactuando de manera animada con los compañeros. Pero también se nota que es bien serio a la hora de hacer su trabajo.
“Está lleno de energía”, dijo Gibson. “Es eléctrico. Es muy juguetón, pero cuando sale al terreno es muy intenso. Le gusta emplear sus habilidades. Lo ha hecho muy bien con nosotros.”
La energía y el ánimo que mencionan Montero y Gibson se han visto con tanta frecuencia como en años anteriores, a pesar de la difícil situación con los cuatro jardineros. Eso vale oro ante los ojos de los Diamondbacks.
“Es un profesional”, dijo Montero. “Eso lo saben no sólo los Diamondbacks, sino los demás equipos. Es un compañero de equipo. Es un jugador que resalta en todos los clubhouses, por el simple hecho de que siempre está positivo y les desea lo mejor a sus compañeros.
“Primero que nada, desea ganar.”, continuó el catcher. “Creo que ha tomado esto como un profesional maduro. Aparte, estamos hablando de una persona de tan sólo 25 años y después de haber ganado un Gold Glove, tener una temporada sólida como tuvo el año pasado; eso deja mucho que pensar y nos deja todos claros en que es un líder. Es un líder en un clubhouse y es una persona que se le debe respeto.”
Agregó Gibson: “Siempre está hablando en el clubhouse y en el dugout, esté jugando o no, y sin importar si lleva tres hits o se ha ido en blanco.”
UNA FIGURA BIEN QUERIDA
El hecho de ser el más popular en las votaciones para el Bobblehead dice mucho sobre lo querido que es Parra en Arizona.
La fanática Susan Price, abonada de los Diamondbacks desde el 2001 y una de las caras más reconocidas en las primeras filas del Chase Field, es una de los tantos aficionados que valoran lo que ha forjado Parra aquí.
“Es una persona que da mucho de sí a los fans, firmando autógrafos y cosas así”, dijo Price, quien sigue la trayectoria de Parra desde los primeros años de la carrera del venezolano en las instalaciones de aquel entonces de los Diamondbacks en Tucson, Arizona. “Con él, puedes decir que estás orgulloso de que esté en tu equipo.”
Para Parra el cariño es mutuo, algo reflejado en su elección entre los fanáticos para el obsequio del sábado.
“Es muy importante cuando tú vas al mall (centro comercial), cuando tú vas a comer y los fanáticos te aclaman”, expresó. “Mi trabajo es dar lo mejor de mí para los fanáticos, para el equipo y para ganar. Me encanta Arizona, me encantan los fanáticos, me encanta el estadio, me encanta jugar aquí. Estoy orgulloso de estar aquí.”
David Venn / LasMayores.com
0 comentarios