¿QUÉ LE FALTA A LOS YANKEES?
Por Andrés Pascual
Ya no son aquel club que cualquier niño tuvo como la meta suprema en sus sueños por jugar pelota en cualquier parte del mundo.
Hasta hoy, ser yanquista ha sido pertenecer a una congregación de obligado respeto y permanente veneración.
Desde 1921, el club se erigió en la más formidable academia fanática del beisbol mundial: “como Babe, como Dimaggio, como Mantle, como Rizzuto…” esos nombres eran la referencia inevitable a la hora de enumerar las razones por las que existía la palabra “ganar”.
El fanático de antes (tampoco el de hoy, pero sin garantías) no se conformaba con el segundo lugar: para los ex Bombarderos nunca fue aceptable perder la Serie Mundial, porque no los consolaba el segundo lugar.
Los inquilinos del Bronx se imponían, porque avasallaban a la oposición con el juego más inteligente y seguro que jamás se ha vuelto a repetir, porque nunca perdían la confianza en sí mismos y eso, cuando se combina con “determinación”, significa “imbatibilidad”.
A finales-principio de los 30´s jugó un club superior a los Yankees en todo, hecho con paciencia milimétrica por su dueño: los Elefantes Blancos de Connie Mack o Atléticos de Filadelfia, sin embargo, solo pudieron disfrutarse 3 temporadas a todo tren de la novena, porque Mack, apremiado por razones económicas, tuvo que vender a sus principales columnas como Lefty Grove, Jimmie Foxx o Mickey Cochrane.
Ante este lamentable acontecimiento por exigencias de mercado, se puede decir que hasta la suerte estuvo de parte de los Yankees, porque, ¿Qué hubiera sucedido si Connie Mack no desintegra al Filadelfia? ¿La historia de los 30´s y una parte de los 40´s en la Liga Americana hubiera sido como fue? Yo tengo dudas.
Acaban de perder por barrida la Serie de Liga del Joven Circuito, los masacró el Detroit, porque son un club superior a los ex Mulos en todo, incluso en la dirección en el terreno y ni hablar de las oficinas.
Verdad que se lesionó Dereck Jeter, sin embargo, no creo que hubiera sido suficiente su presencia para imponerse.
Hay un problema, el fanático de los Yankees no quiere abrir los ojos a la realidad de que este club es otro más con posibilidades, pero no el favorito a la cañona, hace rato que la familia Steinbrenner viene conspirando contra la supremacía absoluta del equipo, por lo que parece que le falta poco para cruzar el estambre después del ganador permanentemente. En esta carrera entraron segundos del club del barrio de la Motown.
Tan desacreditados están que, de ser el objetivo supremo del pelotero de cualquier latitud, se han convertido en una organización apestada, que la rechazan muchísimos jugadores de gran nivel y hasta cláusulas establecen para impedir su traslado hacia el equipo.
No quieren ayudarlos a ganar cuando están en plena forma y evitan enfundarse en la franela gloriosa, sin embargo, a sabiendas de que tienen un gerente pésimo, consentido de una familia-dueño también pésima para manejar la franquicia como debe ser desde hace 41 temporadas, esos jugadores se ponen a la disposición del club cuando ya no valen un centavo como atletas, para robarles el dinero con contratos que son una vergüenza por lo exagerados e improductivos.
El principal problema que tienen los Yankees son sus propietarios, el gerente general, el público de la ciudad y la media encargada de agitar a ese fanático, capaces de destruir a un pelotero, a un manager o a “Juan Bimba” sin contemplaciones, de las mil y una forma que conocen.
Y eso no se puede arreglar, porque la falta de oportunidad ante situaciones que lo ameritan de Alex Rodríguez, también es responsabilidad de la gerencia, que lo trajeron al equipo con un contrato que nunca debió ser por lo extravagante: al dominicano o a cualquiera que jugara para los Yankees por ese dinero se le iba a convertir en un infierno el terreno en esta era de expansión, de Sindicato, de beisbol convertido en stage de farándula y de historias de brujas como la de los esteroides.
La caída del Imperio del Bronx comenzó hace más de 5 años, ahora es que empiezan a abrirse a la realidad los interesados.
¿Acaso van a botar a Cashman y poner al club en venta?
0 comentarios