Cachorros quieren ganar

  ¿Serán las libras de grasa la diferencia entre un equipo decente y un equipo capaz de pelear el banderín? Los Cachorros de Chicago registraron su tercera temporada seguida con saldo positivo, como escoltas de San Luis, pese a ser golpeados por lesiones, a no tener bateo oportuno y mostrar falencias de fildeo. Pero de poco consuelo sirvió. En la Ciudad de los Vientos lo que se anhela es ganar un campeonato de la Serie Mundial y acabar con una sequía que se remonta a 1908. Creen que tienen los elementos para aspirar a coronarse campeones, especialmente ahora que Carlos Zambrano y Geovany Soto se presentaron a los entrenamientos con varias libras de menos. La temporada previa fue la tercera en fila en la que Chicago dejó un saldo positivo en su récord, algo que no habían conseguido en casi cuatro décadas. Lou Piniella llegó hace cuatro años con el encargo de ser el manager que los llevaría a la tierra prometida y ahora afronta el que podría ser su último intento al iniciar la temporada que completa su contrato. Piniella no pierde la confianza. "Voy a hacer todo lo humanamente posible, yo y mis coaches, para asegurar que este equipo le vaya bien y pueda aspirar en la postemporada", dijo Piniella. "Más allá de eso, lo que pase conmigo será rectificado al final de la temporada. Hay cambios en varios sentidos, el más importante en cuanto a los propietarios del club. La familia Ricketts, tras pagar 845 millones de dólares, adquirió el 95% de las acciones. También se procedieron a hacer algunos cambios estructurales al viejo Wrigley Field. Chicago ganó el título de la Central de la Liga Nacional en los dos primeros años bajo la batuta de Piniella, pero su marca declinó a 83-78 para quedar segundos detrás de los Cardenales. Alfonso Soriano y Zambrano tuvieron el peor año de sus carreras. El fichaje de Milton Bradley fue un fiasco. Después de salir como el Novato del Año, Soto vio como su promedio al bate menguó 67 puntos porcentuales. En materia de refuerzos, los Cachorros no hicieron gran cosa y hasta dejaron ir en la agencia libre al abridor Rich Harden. Los jardineros Marlon Byrd y Xavier Nady son las principales novedades. Tras difíciles negociaciones, pudieron desprenderse de Bradley mediante un canje con Seattle por el pitcher Carlos Silva, uno que tampoco es una joya. Para volver a la cima de su división, Piniella depende del repunte de varios integrantes de su tropa y el efecto positivo que puedan tener ajustes en el engranaje. Zambrano y Soto se reportaron en mejores condiciones físicas tras dedicarse a perder peso en el receso. Es esencial que los dos recuperan su forma ideal, sobre todo Zambrano por ser el as de la rotación abridora. Las nueve victorias que el venezolano obtuvo en 2009 fueron el total más bajo en una campaña completa, además de pasar dos veces por la lista de lesionados por problemas musculares y en la espalda Se presentó a la pretemporada con unas 15 libras (7 kilos) libras menos de peso. "Soy un tipo orgulloso y obviamente no quedé orgulloso de la temporada que tuve el año pasado", dijo Zambrano. Soto rebajó aún más: 40 libras (18 kilos). El boricua fue la gran decepción al extremo que Piniella tuvo que sacarle de la alineación varias veces. Su promedio de bateo fue un raquítico .218. Zambrano encabezará una rotación que en teoría luce fuerte, aunque al inicio echarán de menos al zurdo Ted Lilly al recuperarse de una operación en el hombro. Ryan Dempster (11-9) y Randy Wells estarán detrás de Zambrano. Wells sobresalió en su año de novato al establecer con 3.05 la mejor efectividad de la rotación. Tom Gorzelanny y Jeff Samardzija llenarían las otras plazas, con el venezolano Silva también en la jugada (5-18 en los dos últimos años). El dominicano Carlos Mármol ahora sí será el cerrador, luego que recibió la titularidad cuando Piniella perdió la paciencia con Kevin Gregg. Mármol respondió acreditándose el rescate en las 11 oportunidades que tuvo al final de la campaña. Pero sigue en el aire la desconfianza por su descontrol, lo que se plasmó en 65 boletos en 74 innings. Hay algo de alarma por la lesión que acaba de sufrir el venezolano Angel Guzmán (desgarro de ligamentos en el hombro), ya que pierden a su mejor preparador y alguien que hubiese podido ser una alternativa en el caso que Mármol no rinda la talla. En cuanto al orden ofensivo, la novedad es que el torpedero Ryan Theriot estará como primera bate en vez de Soriano, ahora más abajo. El jardinero derecho Kosuke Fukudome lo hará segundo. Una importante adición ha sido la del coach de bateo Rudy Jaramillo, quien es considerado como uno de los mejores en las mayores. Su trabajo podría ayudar a que Soriano, a quien ya guió en Texas, vuelva a tener un año productivo tras registrar promedio de .241 con 55 remolcadas. El inicialista Derrek Lee y el antesalista dominicano Aramis Ramírez siguen como los dos cañones principales. Lee viene de un año en el que produjo 111 carreras con 35 jonrones, mientras que Ramírez bateó para .319 pese a verse afectado por problemas físicos. Byrd, quien lideró a Texas con sus 89 impulsadas, estará en el bosque central. Mike Fontenot será el intermedista