Mercedes 450 SEL (1973-1980)
1ª CLASE
A finales de los años 60 se compraba un Mercedes por su estrella, aunque también por sus cualidades: motor, solidez, confort. Pero ¿eran realmente automóviles cuya superioridad justificaba un precio mas elevado? Con la nueva clase S, presentada en 1973, la respuesta es… Si.
La aparición en 1971 de los coupes y descapotables 350 SL y SLC marca el comienzo de una renovación estética de toda la gama Mercedes. Pero los cambios son mas profundos y afectan también a los motores y, sobre todo, al chasis de los nuevos modelos. Un equipo
de ingenieros, bajo la dirección del Dr. Rudolf Uhlenhaut (el padre del Gullwing) lleva años desarrollando varios prototipos (C 111, ESF 05/13) con un objetivo prioritario: la seguridad.
Y el fruto de estos trabajos son precisamente las berlinas de la clase S (280S, 350SE, 450 SEL) rápidas, espaciosas y elegantes, pero que sobre todo destacan por un extraordinario tren delantero que por si solo condiciona el comportamiento dinámico (confort, estabilidad, dirección y frenada) y basta para relegar al olvido a los anteriores modelos de la casa… y a los de la competencia.
El éxito es inmediato (500.000 ejemplares en 8 años) y para colmo el 450 SEL, la versión mas equipada (E) y larga (L) de la gama, es elegido Coche del Año en 1974. Realmente lo merece (V8 de 4,5 l, 225 cv, 210 km/h, y un nivel de confort y seguridad nunca alcanzados antes por un coche de serie) pero Mercedes, que ambiciona enfrentarse con Rolls Royce, necesita algo mas “exclusivo”. Y lo tiene… en casa: el fabuloso V8 M100, un motor que ya mueve al Mercedes 600, la limusina preferida por los grandes de este mundo desde 1964, del papa Pablo VI a John Lennon, pasando por Hugh Heffner, dueño de la revista PlayBoy. Montando este motor en la plataforma del 450, equipada con suspensión hidroneumática, el resultado es el 450 SEL 6,9, calificado por la prensa de la época como “la mejor berlina del mundo”. Y, indiscutiblemente,… lo era.
CARACTERISTICAS
Ya habían aplicado la misma receta en 1968, con el 300 SEL 6,3 (6.526 ej). Pero ahora la cilindrada sube a 6,9 l, la potencia pasa de 250 a 286 cv y, sobre todo, el par crece de 51 a 56 mkg a 3000 rpm. ¡Kolossal!. Este motor va unido a una caja de cambios automática de 3 velocidades con diferencial autoblocante (40%) y la suspensión, como en todos los clase S, es mediante ruedas independientes (brazos transversales superpuestos delante y brazos tirados detrás). Pero en el 6,9 la amortiguación es hidroneumática (como en los Citroen) y con corrector de altura en los 2 ejes. Los frenos son mediante discos flotantes y de grantamaño (27,8 delante) que opcionalmente (desde el 78) podían contar con ABS (el primero en un coche de gran serie) y la dirección es por recirculación de bolas, contando ambos dispositivos con asistencia. Las llantas son de aleación ligera equipadas con los mayores neumáticos disponibles entonces (Michelin 215/70 VR14) que aunque algo duros, tienen el innegable merito de soportar el peso y las prestaciones de este tremendo automóvil. Y la carrocería tiene una línea sencilla, homogénea y muy redondeada, que consigue disimular bastante su volumen real (mas de 5 metros de largo y casi 1,90 de ancho) y también el de la cartera... de sus propietarios. Porque, aunque costara casi el doble que un 450 SEL y casi el triple que un 280 S, solo una pequeña sigla cromada en el maletero (6,9) lo distinguía de ellos. Y algunos clientes, por discreción, la quitaban.
AL VOLANTE
El interior nos transmite la misma impresión de excepcional calidad que el exterior, algo lógico teniendo en cuenta que en Mercedes había un controlador por cada 10 obreros. El habitáculo es amplio y claro, la visibilidad es excelente incluso de noche y con lluvia (los faros van equipados con sistema de lavado) y también la posición al volante (aunque este sea demasiado grande). El cuadro de mandos responde a las normas básicas de la casa (eficacia y tradición) y ofrece informaciones completas y fáciles de leer, que es lo esencial. Y los acabados (espesa moqueta, suntuoso terciopelo en los asientos) y el equipamiento (cierre centralizado, elevalunas y retrovisores eléctricos, climatizador, programador de la velocidad de crucero,...) explican el alto precio (entonces) del modelo.
Y la experiencia de conducirlo… también. A priori, podemos dudar sobre la utilidad y las posibilidades de utilización de una potencia tan tremenda en una “simple berlina familiar”. Después de todo, los 280, 350 y 450 SEL ofrecen, bajo un aspecto idéntico, prestaciones bastante respetables y en cualquier caso suficientes para el común de los mortales (280, 200 km/h; 350, 205 km/h; 450, 210 km/h). Entonces… ¿para que comprar un 6,9?. Pues, sencillamente,... para disfrutar. Para empezar el V8 posee una educación, una docilidad y una vocación de servicio poco corrientes: jamás la menor vibración ni el mas leve gruñido de satisfacción, su arranque es instantáneo, es un monumento de discreción y de buen gusto mecánico. Y la caja de cambios automática esta a la altura, con un escalonamiento perfecto (100, 150, 225) que, unido al enorme par, permite una conducción relajada sin necesidad de recurrir al “kick– down”. Si a esto añadimos una auto-estabilidad impecable (incluso en las grandes curvas), un confort de calidad (suspensión hidroneumática) y un silencio de catedral (no solo del motor, sino también de rodamiento y aerodinámico), el resultado es un autentico salón rodante que se desplaza ¡a mas de 200 km/h!.
Pero si se nos antoja (en los adelantamientos por ej) basta con aplastar el acelerador para engranar la marcha inferior y convertir este salón en un furioso deportivo. Los reprises son fulgurantes, y también las aceleraciones: 0 -100 en poco mas de 7” y los primeros 1000 m en apenas 28”. Aunque, mas que estas cifras, es la facilidad con la que se obtienen lo que nos asombra: la motricidad es excelente y, gracias al diseño de las suspensiones, el morro no se levanta en las aceleraciones ni se clava en las frenadas y el balanceo, en los virajes y con 2 toneladas que mover, es casi inexistente. El equilibrio y la adherencia son notables la dirección, aunque asistida, es precisa y estable, informándonos siempre de donde están las ruedas, y el 6,9 gira de una pieza trazando una trayectoria tensa y precisa, que genera una fuerza centrifuga que solo reclama… unos asientos mas envolventes.
Queda la cuestión del consumo, descomunal a este ritmo (25 litros es mucho... se sea rico o no) pero bastante razonable (15 litros) si aceptamos las limitaciones de velocidad. La de
la adherencia (delicada sobre mojado). Y la de los frenos (siempre delicada en un clásico).
Pero... ¡no en este!. Si al principio, en frío, el pedal exige una presión considerable, ya en caliente (o sea, cuando importa) el apoyo necesario es mucho mas razonable y la frenada potente y... progresiva. Solo conviene recordar que, en autopista, alcanzamos la velocidad máxima casi sin darnos cuenta y que 2 toneladas, lanzadas a 225 km/h, necesitan campo libre para detenerse. Cuidado con el trafico y sobre todo… ¡que nos vean venir!.
COMPRAR UNO
La oferta, ya abundante en cualquier clase S, es suficiente para su buque insignia, el 6,9 , que puede encontrarse por unos 10.000 o 15.000 € (en estado de concurso). Lo mejor (y difícil) es encontrar uno que haya tenido un único propietario, porque estará muy cuidado
(por el… o por su chofer). Compruébenlo (mantenimiento, facturas).
En cualquier caso, el V8 es prácticamente inmortal, pero la corrosión (pese a la legendaria calidad Mercedes) es posible. Descártenla y repasen los accesorios, porque aunque todos pueden comprarse en la casa los precios son prohibitivos (5.000 € la climatización, por ej).
¡Ah! y no olviden, antes de decidirse, medir su garaje (5,06 x 1,86 m).
CONCLUSION
Hoy como ayer, el 450 SEL 6,9 es un concentrado de tecnología Mercedes que roza la perfección. Solo tiene una pega (resuelto el mantenimiento) y es consecuencia directa de su extraordinaria aptitud para las altas velocidades: si lo compramos... ¿cuanto tiempo conservaremos el carnet de conducir?.
PRODUCCION
450 SEL 4,5 (1973-1980) : 59.578 ej.
450 SEL 6,9 (1975-1980) : 7.380 ej.
TOTAL : 66.958 ej.
0 comentarios