Defensa por el medio del terreno sigue siendo vital en G.L.‏

Los días en que los campocortos bateaban poco y los infielders eran algo flacos pero fibrosos han quedado atrás en Grandes Ligas, al menos por ahora, pero la importancia de la defensa por el medio del terreno permanece constante.

La buena defensa en esas posiciones -- receptor, segunda base, shortstop y jardín central -- es vital para el éxito de un equipo, tanto así que es en esas posiciones donde la mayoría de los equipos enfrentan más a menudo la opción de obtener una mejor defensa o una mejor ofensiva, y casi siempre optan por el jugador con el mejor guante.

Consideren los equipos que llegaron a la postemporada este año. Mientras que los Rangers, Yankees y Filis estaban repletos de bates de poder en casi cada posición, el resto de los equipos que avanzaron a los playoffs tuvieron que sacrificar un poco de ofensiva por buena defensa en el medio del terreno.

La ofensiva de los campeones de la Serie Mundial, Cardenales de San Luis, fue liderada sin duda por el dominicano Albert Pujols, Lance Berkman y Matt Holliday. Y debido a su tremendo poder, los Cardenales fueron capaces de alternar su defensa entre los siempre seguros Ryan Theriot y Nick Punto -- dos peloteros que conectaron solamente un jonrón cada uno en la temporada regular-- en la segunda base.

Los D-backs decidieron no contratar a un nuevo shortstop tras la lesión que dejó a Stephen Drew fuera por el resto del año. Aun así, los D-backs se las ingeniaron para llevarse el banderín del Oeste de la Liga Nacional, con Willie Bloomquist llenando el hueco de manera destacada y cometiendo sólo cinco errores como reemplazo de Drew.

En Milwaukee, los Cerveceros tuvieron al cubano Yuniesky Betancourt en el shortstop, mientras que los Rays tuvieron a Reid Brignac (promedio de bateo de .193) y Sean Rodríguez (.223) en el medio de su infield. Austin Jackson, de los Tigres, lució con el guante en el jardín central, pero mientras que posee algo de poder y una excelente defensa, se ponchó 181 veces durante la campaña regular.

Mientras los equipos continúan moldeando su roster de cara al 2012, una vez más sus directivas se verán obligadas a tomar decisiones acerca de cómo llenar sus posiciones defensivas más importantes. Y cada vez más la defensa está por encima de la ofensiva.

En San Francisco, parece que los Gigantes están cómodos con la decisión de colocar al joven de 24 años de edad, Brandon Crawford, como titular en el shortstop. Crawford ha sido elogiado por su guante a lo largo de su carrera en ligas menores. Su bate, por otro lado, es lo que ha frenado al joven infielder, al registrar un pobre promedio de bateo de .204 en 66 juegos para los Gigantes la temporada pasada.

Debido a que no tienen mucha flexibilidad con su nómina -- y hay rumores de que los Gigantes tienen intenciones de amarrar a largo plazo a los lanzadores derechos Matt Cain y Tim Lincecum -- Crawford pudiera ser la mejor opción del club. Y mientras los Gigantes cuentan con el venezolano Pablo Sandoval, un saludable Buster Posey, al recientemente adquirido dominicano Melky Cabrera y al bateador zurdo Aubrey Huff, los Gigantes tendrían dificultades para comenzar la falta de producción de Crawford, en caso de ganarse el puesto.

Kansas City también cuenta con un trío de talentosos jóvenes. El patrullero central Lorenzo Cain, el segunda base Johnny Giavotella y el shortstop venezolano Alcides Escobar tienen el potencial para aparecer en las mejores jugadas de la noche en televisión.

Giavotella batalló tras su debut en las Mayores la temporada pasada, bateando para .247, mientras que Escobar incrementó su promedio de bateo casi 20 puntos, a .254, en su segunda campaña completa en Grandes Ligas. Cain también debería estar listo para asumir la titularidad en el jardín central, y mientras su promedio de bateo de .295 de por vida en las menores no es algo para pasar desapercibido, su defensa siempre ha sido elogiada.

Aún si los promedios de bateo de estos peloteros oscilan entre .250, su defensa debería ser clave para el éxito de sus equipos, especialmente para el cuerpo de lanzadores de Crawford en San Francisco. Además Brendan Ryan de los Marineros, cuyo promedio de por vida es de .254, y Jason Bartlett de los Padres, quien ha bateado para alrededor de .250 en las últimas dos campañas, son dos veteranos que han demostrado su valor para equipos contendientes con su gran defensa en el campo corto.

Ernie Banks y Cal Ripken Jr. pudieron haber revolucionado la posición de shortstop durante sus carreras y otros, como Alex Rodríguez, le siguieron, pero esos fueron talentos únicos en su generación.

Cuando se trata de llenar la tarjeta del lineup, la defensa por el medio del terreno siempre es prioridad.