Billy Beane, el mejor gerente general
Le ofrezco una disculpa a Andrew Friedman en Tampa Bay, o John Mozeliak en San Luis o Neal Huntington en Pittsburgh, o Rubén Amaro Jr. en Filadelfia (¡Es broma, aficionados de los Filis!), si me gano $750 millones en la lotería y adquiero una franquicia de Grandes Ligas, Billy Beane sería a quien contrataría para que dirigiera mi franquicia.
Aunque quizá intenta robarme a alguno de los muchachos de estadísticas de Tampa, San Luis y Pittsburgh.
Los Atléticos de Oakland amarraron su segundo título en fila de la División Oeste de la Liga Americana, con una victoria el domingo por 11-7 sobre los Mellizos de Minnesota, una prueba de que Beane puede construir un ganador sin Barry Zito, Tim Hudson yMark Mulder. Quizá las ideas detrás de “Moneyball” han sido copiadas y expandidas encuentren una eficiencia de mercado y explótenla, y contraten a analistas inteligentes que los ayuden a encontrar las ineficiencias pero Beane ha ganado los últimos dos años casi a la vieja usanza: Realiza buenas transacciones y escarba entre los estantes de “ofertas” para compras baratas.
Los Atléticos no están construidos alrededor de agentes libres caros; todos sabemos eso. Pero tampoco están construidos a base de una pila acumulada de selecciones altas de primera ronda. No hay ningún David Price o Evan Longoria en el roster de Oakland, no hay ningún Andrew McCutchen, Pedro Álvarez o Gerrit Cole. La única selección de primera ronda desarrollada en casa que hizo una aportación significativa esta temporada es el abridor del domingo, Sonny Gray, reclutado en la primera ronda de 2011 procedente de Vanderbilt, quien mejoró a 4-3 con efectividad de 2.90 en nueve aperturas. No fue su mejor salida siete imparables y cuatro carreras en cinco entradaspero fue lo suficientemente bueno para asegurar su lugar en la rotación de postemporada de Oakland.
Pero incluso Gray fue solamente la selección 18 global en la primera ronda, suficientemente baja para ubicarte más allá de territorio seguro. Incluso en la época posterior a Moneyball, los Atléticos nunca tocaron fondo de la forma como lo hicieron los Rays o los Piratas; su peor marca bajo Beane fue de 74-88 en 2011. La única selección del “Top 10″ que la franquicia ha tenido desde que reclutó a Mulder y Zito en 1998 y 1999 fue Michael Choice, décimo global en 2010 (Choice ha tenido 17 apariciones al plato este año con los Atléticos).
Solamente cuatro peloteros de los Atléticos ganan más de $5 millones los jardinerosChris Young ($8.7 millones),Yoenis Céspedes ($8.5 millones) y Coco Crisp ($7 millones), además del abridor/relevista Brett Anderson ($5.75 millones). Comparen eso con su rival divisional, los Vigilantes, que tienen 10 peloteros de su roster del día de apertura que ganan al menos $5 millones, o el campeón del Este de la Liga Americana, Boston, que tiene 12.
Crisp fue una de las figuras el domingo, bateando de 4-2, incluyendo un jonrón de tres carreras en la segunda entrada, donde Oakland timbró en seis ocasiones. Crisp ha sido una gran sorpresa en el departamento de poder, con 22 cuadrangulares y 65 producidas bateando como primero en la alineación, 13 de ellos en 53 partidos tras la pausa del Juego de Estrellas. Crisp originalmente fue firmado como agente libre tras una campaña plagada de lesiones con Kansas City en 2009, donde bateó .228 y jugó únicamente 49 partidos. Beane compró barato, tal y como lo hizo con el agente libre de Ligas Menores Brandon Moss y un veterano que había visto pasar sus mejores épocas como el abridor Bartolo Colón. En otras ocasiones, él vendió caro, como cuando mandó a un abridor establecido como Trevor Cahill a Arizona a cambio de Jarrod Parker y Ryan Cook.
Bob Stanton/USA TODAY SportsOakland puede celebrar la conquista de títulos divisionales de manera consecutiva gracias a lo que se hace fuera del terreno de juego.
La transacción más inteligente de Beane en el receso de temporada fue tapar el hueco que tenía el equipo en las paradas cortas. Los torpederos de Oakland habían bateado .203 con un OPS de .585 el año pasado. Beane adquirió a Jed Lowrie de los Astros a cambio de tres jugadores, incluyendo al primera base/bateador designado Chris Carter, quien había sido un buen bateador derecho por comité para los Atléticos en 2012. Lowrie tiene un buen bat para ser torpedero, pero había sido muy afectado por las lesiones y no tiene el perfil defensivo que podría esperarse de un parador en corto de los Atléticos. Pero Beane sabía que necesitaba más ofensiva de su cuadro y Lowrie ha jugado en 149 partidos y bateado.288/.344/.443 el OPS más alto entre todos los torpederos regulares (Troy Tulowitzki y Jhonny Peralta tienen promedio más alto pero no califican).
Pero Beane no se detiene ahí. A finales de marzo, tomó de waivers a Nate Freimanprocedente de los Astros (él había sido una selección de Regla 5 de los Padres). Freiman era un veterano de Ligas Menores a los 26 años. ¿Por qué el interés en alguien que no pudo establecerse con los Astros? Freiman había bateado .348 contra los zurdos en Clase Doble-A en 2012. Él le dio a los Atléticos un bateador derecho para reemplazar a Carter. Eso no es el estante de ofertas, es el de los desechos.
Ahora todo lo que Beane y los Atléticos deben hacer es probar que todo lo que hacen funciona en la postemporada.
David Schoenfield / ESPN
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