El curioso caso de Lee Smith
Quiero considerar la pregunta sobre las credenciales de Lee Smith para el Salón de la Fama de manera justa. Pero, sigo regresando a lo que entiendo es la pregunta esencial: ¿De verdad prefieres tener en tu equipo a Lee Smith o a Barry Larkin, o Alan Trammel o Edgar Martínez o Tim Raines o Bernie Williams o Larry Walker o Jack Morris or Jeff Bagwell o Dale Murphy o Fred McGriff?
¿Piensas que si los Cachorros de Chicago hubieran llamado a los Expos de Montreal o Bravos de Atlanta en 1983 -- cuando Smith estaba en su momento más dominante -- y dijeran "Hey, te damos a Smith a cambio de Raines o Murphy" que esos equipos hubieran estado de acuerdo? En 1991, cuando Smith terminó segundo en la votación para el Cy Young de la Liga Nacional, ¿usted cree que los Padres de San Diego hubieran cambiado a McGriff para adquirirlo?
¿No es la respuesta clara?
Smith fue seleccionado por los Chicago Cubs en la segunda ronda del draft de 1975 tras haber sido descubierto en su pequeño pueblo en el estado de Luisiana por el legendario Buck O'Neill. Era grande, tiraba fuego y no tenía idea alguna de los que estaba haciendo. En 1978, lanzando como abrido para el equipo Doble A en Midland, Smith tiró 155 entradas, embasó a 128 y ponchó a 71. Su efectividad fue de 5.98. Estuvo a punto de quitarse del béisbol, pero Billy Williams lo convinció de que se quedara. ¿Cuáles eran las probabilidades de que se convirtiera en candidato al Salón de la Fama en ese punto de su carrera? Yo diría mejores que las probabilidades de que los Cachorros ganen la Serie Mundial en el 2012.
Smith, por supuesto, se convirtió en un relevista y se transformó en uno de los taponeros más temidos en el deporte con su caminar lento desde el bullpen de Wrigley Field, su gorra bailando en su cabeza y tirando petardos en las sombras de la tarde. Era esa caminada lenta lo que yo más recuerdo de Smith ya que, de hecho, tarde en su carrera era notorio por tomar siestas durante los juegos y no salir al bullpen hasta la séptima entrada.
Lo que no recuerdo es haber pensado que Smith era el mejor taponero en el béisbol. Pero las memorias son lejanas, así que vamos a dar un vistazo a sus mejores temporadas.
1983: 4-10, 1.65 ERA, 29 salvados, 103.1 IP, 70 H, 41 BB, 91 SO
En su única temporada con efectividad por debajo de 2.00, Smith lideró la Liga Nacional en juegos salvados y terminó cuarto en las mayores. Uno podría hacer el caso de que Smith era el segundo mejor relevista en el béisbol detrás de Dan Quisenberry (45 salvados, 139 entradas, 1.94 ERA), aunque Jesse Orosco también estuvo dominante (1.47 ERA en 110 entradas) y Orosco tuvo marca de 13-7 en vez de 4-10.
1984: 9-7, 3.65 ERA, 33 salvados, 101 IP, 98 hits, 35 BB, 86 SO
Los Cachorros ganaron la division y Smith terminó segundo en juegos salvados detrás de Bruce Sutter en la Liga Nacional pero no tuvo una temporada particularmente dominante.
Quisenberry, Willie Hernández (ganador del Cy Young y el JMV en la Liga Americana), Goose Gossage y Bill Caudill, por ejemplo, tuvieron mejores temporadas. De hecho, 77 lanzadores con al menos 100 entradas lanzadas tuvieron mejor promedio de efectividad ese años. En la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, Smith lanzó que le dio a los Cachorros la derrota en el Juego 4 cuando Steve Garvey se la sacó del parque.
1988: 4-5, 2.80 ERA, 29 salvados, 83.2 IP, 72 H, 37 BB, 96 SO
Ahora con los Medias Rojas de Boston -- lo consideraban tan valioso que los Cachorros los enviaron a Boston por Al Nipper y Calvin Schiraldi -- Smith bajó su efectividad por debajo de 3.00 por primera vez desde 1983 y los Medias Rojas ganaron la División Este de la Liga Americana. Smith salvó 29 partidos en 37 oportunidades, un porcentaje de éxito de 78 por ciento. Terminó noveno en las mayores en juegos salvados y entre lanzadores con al menos 25 salvados, terminó noveno en efectividad, sexto en entradas lanzadas, segundo ponches y 13ero en porcentaje. Yo no diría que estuvo entre los mejores tres o cuatro taponeros ese año.
1990: 5-5, 2.06 ERA, 31 salvadoss, 83 IP, 71 H, 28 BB, 87 SO
Por alguna razón, los Medias Rojas firmaron a Jeff Reardon en la temporada muerta por lo que temprano en mayo enviaron a Smith a los Cardenales de San Luis a cambio de Tom Brunansky.
Smith salvó 31 partidos en 37 intentos, pero fue un gran año para los taponeros: Dennis Eckersley tuvo efectividad de 0.61, Bobby Thigpen salvó 57 partidos y tuvo efectividad de 1.83, Randy Myers y Tom Henke estuvieron tan dominante como Smith. Fue un buen año, pero Smith claramente está detrás de Eck y Thigpen y no mucho mejor que Myers y Henke.
1991: 6-3, 2.34 ERA, 47 salvados, 73 IP, 70 IP, 13 BB, 67 SO
Se darán cuenta que el número de entradas lanzadas de Smith fue en descenso a medida que a los taponeros se les comenzó a proteger. Una vez un relevista de 100 entradas, ya sus entradas han bajado a los 70. Eso no impidió que Smith terminará Segundo en la votación para el Cy Young al liderar las mayores en juegos salvados. Tuvo un buen año pero Bryan Harvey fue el taponero más dominante esa temporada con 46 salvados, efectividad de 1.65 y una relación de ponches a bases por bolas de 101/17. Yo argumentaría que Eckersley, Rick Aguilera y Henke fueron tan o más efectivos que Smith, quien convirtió el 89 por ciento de sus oportunidades para salvar -- la tercera relación más alta de su carrera.
1992: 4-9, 3.12 ERA, 46 salvados, 75 IP, 62 H, 26 BB, 60 SO
Smith lideró la Liga Nacional en juegos salvados, pero con nueve derrotas y ocho salvamientos perdidos, no fue una temporada estelar. Entre los 12 relevistas con al menos 30 salvados, Smith terminó 10mo en efectividad, sexto en entradas lanzadas, sexto en ponches y séptimo en OPS permitido. Y por alguna razón terminó cuarto en la votación para el Cy Young. (Un total de 13 lanzadores en la Liga Nacional lanzaron 200 entradas con una efectividad menor que la Smith en esa temporada).
1994: 1-4, 3.29 ERA, 33 salvados, 38.1 IP, 34 H, 11 BB, 42 SO
Todavía lanzando a sus 36 años, Smith se convirtió en ejemplo de un relevista de una entrada -- de hecho, ni eso. Lanzó en 39 partidos, así que promedió un poco menos de una entrada por salida. Lideró las mayores en salvados en una temporada que fue acortada por una huelga, pero hablemos en serio -- esto no fue una gran temporada. Entre los 10 taponeros con 20 salvados, Smith tuvo la menor cantidad de entradas lanzadas, terminó sexto en efectividad y séptimo en OPS permitido.
Aquí tienen otra manera de mirar el final de la carrera de Smith: De 1992 a 1995, lideró las mayores con 15 salvados, nueve más que Myers. ¿Pero en realidad fue dominante en ese periodo de tiempo? Entre los 15 relevistas con al menos 50 salvados en esos años, la efectividad de 3.43 quedaría en el lugar número 12 y su OPS permitido en la 11ra posición. El logró sus juegos salvados porque no era terriblemente malo y tenía uno de los trabajos más fáciles en el béisbol. Entrar con las bases vacías y sacar uno o dos outs.
¿Y finalmente que tenemos? Si, se retiró como el líder de todos los tiempos en juegos salvados con 478, pero le pasaron Trevor Hoffman y Mariano Rivera. Todavía está ranqueado tercero y el taponero activo más cerca es Francisco Cordero con 327 salvados.
Al final de cuentas, Smith fue un muy buen relevista, pero también fue un coleccionista. Considerado la naturaleza protegida de su posición, uno tiene que ser dominante por un periodo de años para ameritar consideración para el Salón de la Fama y Smith nunca tuvo un periodo dominante como los tuvieron Rivera, Goose Gossage, Billy Wagner o Joe Nathan.
En su primer año en la papeleta, Smith recibió el 42.3 por ciento del voto; nueve años más tarde no ha logrado subir mucho con 45.3 por ciento. La línea ya está hecha con Lee Smith, una línea tan fuerte como la que tienen los usuarios de esteroides. Tuvo una gran carrera, llenó su rol en su posición en una era en dónde muchos no pudieron. Pero lo digo otra vez: Uno no puede votar por Smith cuando hay tantos candidatos más valiosos y más viables.
AUTOR:
David Schoenfield
es escritor senior para ESPN.com. Labora con la empresa desde 1995 y ha fungido como editor de béisbol y editor senior de Page 2.
Lee Smith fue un gran lanzador, pero no fue una figura dominante en su carrera.
0 comentarios