El último adiós a Julio Ernesto Vila
Trabajó en muchos diarios de aquí y del exterior. Fue durante años comentarista de Torneos y Competencias. Viajó por el mundo como periodista y jurado del Consejo Mundial del Boxeo. Escribió un libro, “El boxeo y yo”. Le prohibieron la entrada para siempre al Luna Park por las críticas a su dueño, Tito Lectoure.
Más allá de todo esto fue, junto con el maestro Ulises Barrera, el que quizás más supo de boxeo en Argentina. Sin embargo, ayer por la mañana, en el cementerio de la Chacarita, donde fueron cremados sus restos, apenas dieciocho personas participaron en su despedida. Una cosa habitual en esta gran metrópolis donde la indiferencia es moneda común, bajo el pretexto de “estuve muy ocupa do”.
Estuvieron en Chacarita periodistas conocidos, entre ellos Osvaldo Príncipi, comentarista de Canal 7 en la pelea del sábado último de Maravilla Martínez. El único orador fue el exsubdirector de El Tribuno, Carlos Vernazza, quien recordó la larga y fecunda trayectoria de Vila, las veces que visitó Salta -trabajó dos décadas en El Tribuno-, por la profesión o para encontrarse con sus amigos.
Lástima que en Buenos Aires, donde llegó a los 7 años desde su natal y cordobesa Villa Dolores, haya sido tan indiferente en su despedida. Con excepciones: todos los medios difundieron su fallecimiento y reconocieron su capacidad y su dignidad sin dobleces.
El CMB decretó 3 días de luto
El Consejo Mundial de Boxeo decidió tres días de luto por el fallecimiento de Julio Ernesto Vila, experiodista y clasificador de la entidad. El gran periodista trabajó durante 37 años para el CMB en la época de oro de la disciplina.
Por esto último José Sulaiman, titular del CMB, escribió un comunicado en memoria de “un gran amigo”. “Fue siempre un hombre honesto, con principios definidos”, sostiene en parte el comunicado.
Verdadero maestro de la profesión
El domingo pasado dejó de existir físicamente Julio Ernesto Vila, uno de los más grandes periodistas argentinos de boxeo. Trabajó para El Tribuno en las décadas del 80 y 90, años dorados para el pugilato nacional e internacional. Fue clasificador del Consejo Mundial de la disciplina también durante sus mejores momentos.
Vila había nacido el 18 de junio de 1938 en Villa Dolores, Córdoba, y murió a los 74 años, dejando a la posteridad lecciones magistrales de análisis y comentario de pugilismo.
En 1945 se mudó a Buenos Aires y se convirtió, además, en un recopilador de la historia del boxeo en Sudamérica, reconocido entre los más grandes expertos del mundo.
Además de trabajar para El Tribuno, lo hizo para las revistas KO Mundial, Codex Deportiva, El Gráfico, y en todas las emisoras de radio de la ciudad entre 1960 y 1995.
Desde 1993 hasta 2007 fue comentarista del ciclo Boxeo de Primera de TyC Sports, junto a Osvaldo Príncipi. También hizo periodismo en Canal 9 y Telefe y realizó una colección de fascículos semanales llamada 20 campeones y una leyenda (1996-1997). Resumió su extensa carrera profesional en el libro “El boxeo y yo”.
OSVALDO PRINCIPI “Lo considero mi mentor”
Uno de los pocos periodistas especializados del boxeo nacional e internacional que estuvo ayer en la cremación de Julio Ernesto Vila, en el cementerio de la Chacarita, fue Osvaldo Príncipi. En diálogo telefónico con El Tribuno, el docente y periodista expresó su opinión acerca de quien consideraba su mentor.
“La pérdida de Julio Ernesto significa la resignación del historiador más importante de habla hispana. Fue quizá el último testigo viviente de los capítulos más salientes de la historia del boxeo, sostuvo, y agregó “el último gran referente que podía hablar del boxeo argentino”.
“Se pierde un valor imborrable, un hombre que se cansó del boxeo hace 10 años y lamentablemente nunca más se pudo reinsertar. Hubiese sido muy valioso”, apuntó Príncipi.
“En lo personal fue el hombre que me conecto desde los 14 años con el boxeo, lo considero mi mentor”, concluyó.
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